Una perspectiva global del ombudsman español
Palabras clave:
ombudsman, derechos humanos, “mala administración”, dignidadResumen
El ombudsman es una institución que ha tenido una evolución significativa en las últimas décadas. Su creciente reconocimiento y adaptación en distintos países le ha permitido consolidarse como una figura mundialmente reconocida. No obstante, en la actualidad la mayoría de los Estados democráticos cuenta con una institución similar, es importante reconocer los rasgos distintivos en cada caso concreto, pues aún con todas las similitudes que se pudieran detectar, el ombudsman nunca actuará de la misma manera en dos sociedades distintas.
En el caso de España, el “Defensor del Pueblo” fue reconocido en la Constitución de 1978. Su creación trajo consigo grandes cambios. Con el paso de los años, las Comunidades Autónomas han incorporado figuras similares dentro de sus respectivos estatutos. De manera general, el ombudsman español (sin importar el ámbito de competencias), es una institución que protege los derechos fundamentales frente a los actos u omisiones de la Administración Pública.
Como todas las instituciones el Defensor del Pueblo trabaja con aciertos y fallos, más aún si se toma en cuenta que se encuentra en constantes cambios durante su proceso de perfeccionamiento. A pesar de esto, se constituye como una figura cuya conservación resulta deseable. Así, con todos sus pros y sus contras, es de reconocerse la labor que lleva a cabo el ombudsman, que si bien no es perfecta, parece ser hoy por hoy la mejor manera de combatir los abusos de la Administración Pública.